Cuentan que en un supermercado muy abastecido de la ciudad había un vendedor que conversaba mucho con sus clientes; pero a este tipo le gustaba hablar de Dios; un día platicando con un cliente le confesó que no creía en Dios, diciéndole:
- ”Mire usted por la ventana, ve a ese niño desnutrido y sucio pidiendo limosna, si existiera un Dios no lo permitiría, mire usted más allá, ve a ese tipo mutilado de la pierna derecha, sucio y anda diciendo a todos que tiene SIDA, llora para que le den unas monedas, la verdad que yo no creo que exista Dios”.
El cliente que solamente lo escuchaba paga y se marcha del supermercado, Diez minutos más tarde regresa y busca al vendedor y le dice:
- “ Amigo, ¿usted cree que existan los supermercados?”.
- Pero señor mío, usted está dentro de uno, salta a la vista.
- Bueno le informo que en la puerta hay una criatura que se ve que no come hace días, implorando piedad y peleando con los de seguridad para ingresar por un poco de comida.
Winston Churchill decía: el ciudadano inglés que cumple con sus impuestos, que sabe llevar honrosamente el nombre de su patria, pero no hace nada por mejorar la sociedad inglesa será un ladrón de su tiempo.
Es indudable que cuando la empresa no trasciende a la persona y solamente ve a ella como un cliente más, está condenada a bucear en el mar de la mediocridad y del no compromiso que lo atarán a la ausencia de ideales que ha sido la característica muy marcada de empresas que han fracasado, mucho antes de finalizar el siglo pasado, así como aquellas que no pudieron atravesar el segundo uno del nuevo milenio.
Cuentan que estaban necesitando un gerente general, que se haga cargo de la administración del cielo. Hacía varios años ya que el infierno había repuntado, logrando conseguir más militantes.
Dios se preguntaba por las razones que llevaban a mucha gente optar por entregar sus almas al infierno por toda una eternidad, Muy preocupado convoca a un concurso.
Se presentan dos empresarios uno ético y el otro corrupto. El empresario corrupto se adelanta y encuentra a dos señores parados en la puerta del cielo. Astuto este empresario le dice que aquí es el lugar donde va a reposar su alma, además direccionará al cielo como una empresa exitosa, como la que él tenía en la tierra.
Uno de los tipos que cuidaba la puerta le pregunta:
- “¿Cómo era tu pueblo? ,¿De dónde vienes?”
- Vengo de un lugar horrible donde los hombres se odian, donde la coima se impone al esfuerzo, donde los niños son violados, es decir de un lugar de perdición.
- Entonces para qué quieres entrar a este mundo si es igual al lugar de donde tú vienes.
Se acerca el empresario ético y le pide al portero permiso para ingresar al cielo, éste también le hace la misma pregunta:
- ¿De dónde vienes?”,
- El empresario le responde: “Vengo de un lugar hermoso, en donde los hombres se equivocan pero se reivindican, en donde el hombre se esfuerza notablemente y hace sus cosas con pasión, en donde la gente está esperando que le enseñen a amar, porque sí tiene muchas ganas de entregarle todo sus sentimientos al prójimo.”
- Qué casualidad, le responde el portero, aquí la gente también es como la de tu pueblo, has venido al lugar correcto. Entra.
El otro tipo que también estaba cuidando la puerta sorprendido le pregunta:
- ¿ Por qué al primero le dijiste todo lo contrario?.
- Entiende, los dos vienen del mismo pueblo, lo que hace a un pueblo malo o bueno son las mismas personas y Dios quiere al más capaz.
18.3.10
El gran negocio de vender con Ética
Una empresa vendedora de cereales estaba entregando de regalo, dentro de la caja del producto que vendía dos muñequitos de la serie de dibujos animados Dragon Ball, lo curioso fue que cuando un niño coleccionista y fanático de ese cartoon se dio cuenta que en la caja que había comprado, solamente le había tocado un muñeco, muy triste le pidió explicaciones al dueño de la tienda, a lo que éste sonriente le manifestó su desinterés.
- Oiga señor. le dijo el chico, yo le he comprado esta cajita de cereales porque sabía que me iban a regalar dos muñequitos y solamente he conseguido uno.
-Mira hijo, burlonamente le contestó, con mucho gusto te lo cambiaría, pero lamentablemente la caja ya está abierta , así que no hay lugar a reclamo. Además no soy adivino para saber que a uno de estas cajas le faltaba un maldito muñeco. Así que si quieres quejarte hazlo a la empresa que vende estos cereales.
- Ingenuamente el niño le pregunta, ¿ahí cree usted que me darán mi muñequito Dragon Ball?
- Ja ,ja,ja, rió el dueño.
El chico coge la caja, localiza la dirección , toma un bus y se dirige a la empresa. Llega después de media hora, conversa con el vigilante y le pregunta: “si está el señor que vende estas cajitas”.
- El de seguridad sorprendido le pregunta ¿para qué?.
- Es que quiero que me devuelva mi muñequito.
- ¿Cuál muñequito?.
- El que le falta a mi caja.
- Oye niño no molestes y ve con tus padres que deben estar preocupados.
- No me voy a ir hasta que me den mi muñequito.
- Colmado de impaciencia el vigilante lo lleva del brazo, lejos de la puerta.
De pronto se aparece una limosina enorme, era el dueño, a quien le causó mucha curiosidad el forcejeo que se estaba armando. Se acerca donde estaban forcejeando, de inmediato el vigilante se repone en posición de atención y saluda al dueño.
- Me puede explicar que está pasando aquí, ¿por qué está echando a este niño?.
- El niño interrumpe y le pregunta: ¿Usted es el que hace estas cajitas de cereales?.
- Sí, responde el dueño, ah con que usted es el mentiroso, el que engaña a los niños diciendo que nos va regalar dos muñequitos Dragon Ball, cuando solamente nos da uno.
- ¿ De qué estás hablando hijo?.
- No me llame hijo, porque yo ya tengo mi papá, además él no es mentiroso como usted.
En seguida, el dueño manda a llamar al gerente de producción.
- Sí señor ¿en qué puedo servirle?.
- Este niño me está diciendo que en una de nuestras cajas de cereales ha venido sólo un muñeco cuando la orden era dos.
- Ah no se preocupe señor, en la última producción uno de nuestros empleados por equivocación metió un muñeco en vez de dos.
- Pero si la última producción habíamos efectuado mil cajas de cereales replicó el dueño; eso quiere decir que mil niños deben estar decepcionados en estos momentos.
- Pero no lo tome trágicamente señor, nadie se va a dar cuenta.
- Nadie y este niño qué, ¿por qué no se me avisó antes?.
- Algo tan insignificante, no pensé que iba a ser de su preocupación, señor .
- Escúcheme bien, le dijo el dueño al gerente, cuando usted crea saber qué es o qué no es importante para mí lo llamaré para que reemplace a mi esposa, ¿me entendió?.
Y ahora mismo quiero que en la siguiente producción se introduzcan cuatro muñecos y no dos, a demás de una carta disculpándonos con nuestros clientes.
- Oiga señor. le dijo el chico, yo le he comprado esta cajita de cereales porque sabía que me iban a regalar dos muñequitos y solamente he conseguido uno.
-Mira hijo, burlonamente le contestó, con mucho gusto te lo cambiaría, pero lamentablemente la caja ya está abierta , así que no hay lugar a reclamo. Además no soy adivino para saber que a uno de estas cajas le faltaba un maldito muñeco. Así que si quieres quejarte hazlo a la empresa que vende estos cereales.
- Ingenuamente el niño le pregunta, ¿ahí cree usted que me darán mi muñequito Dragon Ball?
- Ja ,ja,ja, rió el dueño.
El chico coge la caja, localiza la dirección , toma un bus y se dirige a la empresa. Llega después de media hora, conversa con el vigilante y le pregunta: “si está el señor que vende estas cajitas”.
- El de seguridad sorprendido le pregunta ¿para qué?.
- Es que quiero que me devuelva mi muñequito.
- ¿Cuál muñequito?.
- El que le falta a mi caja.
- Oye niño no molestes y ve con tus padres que deben estar preocupados.
- No me voy a ir hasta que me den mi muñequito.
- Colmado de impaciencia el vigilante lo lleva del brazo, lejos de la puerta.
De pronto se aparece una limosina enorme, era el dueño, a quien le causó mucha curiosidad el forcejeo que se estaba armando. Se acerca donde estaban forcejeando, de inmediato el vigilante se repone en posición de atención y saluda al dueño.
- Me puede explicar que está pasando aquí, ¿por qué está echando a este niño?.
- El niño interrumpe y le pregunta: ¿Usted es el que hace estas cajitas de cereales?.
- Sí, responde el dueño, ah con que usted es el mentiroso, el que engaña a los niños diciendo que nos va regalar dos muñequitos Dragon Ball, cuando solamente nos da uno.
- ¿ De qué estás hablando hijo?.
- No me llame hijo, porque yo ya tengo mi papá, además él no es mentiroso como usted.
En seguida, el dueño manda a llamar al gerente de producción.
- Sí señor ¿en qué puedo servirle?.
- Este niño me está diciendo que en una de nuestras cajas de cereales ha venido sólo un muñeco cuando la orden era dos.
- Ah no se preocupe señor, en la última producción uno de nuestros empleados por equivocación metió un muñeco en vez de dos.
- Pero si la última producción habíamos efectuado mil cajas de cereales replicó el dueño; eso quiere decir que mil niños deben estar decepcionados en estos momentos.
- Pero no lo tome trágicamente señor, nadie se va a dar cuenta.
- Nadie y este niño qué, ¿por qué no se me avisó antes?.
- Algo tan insignificante, no pensé que iba a ser de su preocupación, señor .
- Escúcheme bien, le dijo el dueño al gerente, cuando usted crea saber qué es o qué no es importante para mí lo llamaré para que reemplace a mi esposa, ¿me entendió?.
Y ahora mismo quiero que en la siguiente producción se introduzcan cuatro muñecos y no dos, a demás de una carta disculpándonos con nuestros clientes.
17.3.10
FELICIDAD
Cuentan que un día se reunieron tres duendes en una cueva. Estaban tramando hacerle una broma al ser humano que consistía en esconderle la felicidad. Uno de ellos propuso esconderla en el fondo del mar.
No, de ninguna manera, dijo el otro porque el ser humano siendo creativo, ingenioso e inventor podría construir una nave que se sumergiera en el mar y podría encontrarla. Que les parece si la escondemos en el planeta más recóndito del universo. No, de ninguna manera, dijo el que se había opuesto en primera instancia porque el ser humano es creativo, ingenioso e inventor podría construir una nave que volara a través del universo y podría hallar su felicidad y eso no queremos. Entonces, uno de los duendes que había estado callado escuchando con atención a sus compañeros propuso esconder la felicidad dentro del hombre, porque se la pasaría buscando en el fondo del mar y en el universo y no se daría cuenta que la tiene en él.
Esta metáfora nos enseña que el ser humano pierde su tiempo hallando su felicidad en cosas externas y no la genera o la busca en él. Por eso me causa extrañeza el haber visto ayer en un programa de televisión muy popular para los amantes de la cultura por cable, diciendo que la imagen que debe tener un líder se basa en la apariencia física. Se basaban en que la parte física del ser humano es determinante para las relaciones interpersonales.
Muchos limones con una apariencia exquisita terminan siendo agrios.
proverbio árabe
Supongamos que nuestra empresa ha sido muy preciso a la hora de calificar su personal. Sabedor de que la apariencia física es determinante opta por poner las caras más bonitas de la ciudad en cada una de los departamentos de la compañía. Nuestra empresa dedicada a la venta de artículos ferreteros ha proveído a un taller de carpintería. Este carpintero se iba a quejar, pues los artículos proveídos resultaron ser de mala calidad. Éste irritado por el engaño va predeterminado a discutir con la persona responsable. El gerente de ventas, un adonis, lo atiende y trata de convencerlo y como por arte de magia calma al cliente sólo por su apariencia. De ninguna manera, el cliente indignado y el gerente de ventas sin ninguna estabilidad emocional que lo respalde cae también en la desesperación por no poder deshacerse de este ''cliente conflictivo'' .
Cuando uno trabaja en una empresa tiene como elemento fundamental para mantenerse en ella al compromiso, y por consecuencia natural de ese compromiso arraigada con las experiencia vividas, o convivencia de sus colegas y el futuro de la empresa hace que interiorice todo lo que concierne a ella. Es así que siempre llegamos a saber si nuestros productos son buenos o malos, o también caemos en el cinismo de efectuar la venta de nuestros productos como buenos a pesar que es por todos conocidos que son de mala calidad.
De nada nos sirve la apariencia física si no hay fundamento más fuerte que el de tener salud. Si queremos ser líderes empresariales mejoremos nuestra imagen interna y estabilicemos nuestro espíritu y nuestra mente.
Los mares más inmensos del mundo se alimentan de la inmensidad de los ríos que convergen en él.
Anónimo
Se imagina a Mohamas Ghandi alto, corpulento, atlético y con ojos azules. De ninguna manera. Ese hombre era todo lo contrario. En un ser tan pequeño cabía un alma tan grande. Y es con esta apariencia que lideró la resistencia inglesa solamente con la palabra, enfrentando muchas veces la avanzada belicidad del ejército inglés. Pero él tenía el arma más poderosa que puede tener especie alguna la palabra.
Cuando vamos a pagar los recibos por consumo telefónico. Muchas veces la encargada de cobrarlos tiene una actitud indiferente hacia nosotros, pareciera que no advierte la presencia del cliente. A pesar que es una chica hermosa, su interior está lleno de negativismo que hace que se comporte de esta manera. De otra parte, si tenemos a una persona que nos atiende de manera gentil, prácticamente de manera maternal o paternal, nos sentimos cómodos, a pesar que esta persona no es agraciada físicamente.
Cuando uno es feliz hace felices a los demás Anónimo
Yo soy feliz porque disfruto lo poco que tengo, realmente siento placer a la hora de trabajar, siendo conciente que los objetivos que me pueda trazar caerán por su propio peso serán la base para mantener mi felicidad o incluso aumentarla.
Aprendamos a hacer nuestra felicidad o a hallarla. Aprendamos a escuchar a nuestro corazón. Medite, amanezca con una sonrisa en los labios.
Disfrute realmente el viaje, más que el sitio a donde quiere llegar.
No, de ninguna manera, dijo el otro porque el ser humano siendo creativo, ingenioso e inventor podría construir una nave que se sumergiera en el mar y podría encontrarla. Que les parece si la escondemos en el planeta más recóndito del universo. No, de ninguna manera, dijo el que se había opuesto en primera instancia porque el ser humano es creativo, ingenioso e inventor podría construir una nave que volara a través del universo y podría hallar su felicidad y eso no queremos. Entonces, uno de los duendes que había estado callado escuchando con atención a sus compañeros propuso esconder la felicidad dentro del hombre, porque se la pasaría buscando en el fondo del mar y en el universo y no se daría cuenta que la tiene en él.
Esta metáfora nos enseña que el ser humano pierde su tiempo hallando su felicidad en cosas externas y no la genera o la busca en él. Por eso me causa extrañeza el haber visto ayer en un programa de televisión muy popular para los amantes de la cultura por cable, diciendo que la imagen que debe tener un líder se basa en la apariencia física. Se basaban en que la parte física del ser humano es determinante para las relaciones interpersonales.
Muchos limones con una apariencia exquisita terminan siendo agrios.
proverbio árabe
Supongamos que nuestra empresa ha sido muy preciso a la hora de calificar su personal. Sabedor de que la apariencia física es determinante opta por poner las caras más bonitas de la ciudad en cada una de los departamentos de la compañía. Nuestra empresa dedicada a la venta de artículos ferreteros ha proveído a un taller de carpintería. Este carpintero se iba a quejar, pues los artículos proveídos resultaron ser de mala calidad. Éste irritado por el engaño va predeterminado a discutir con la persona responsable. El gerente de ventas, un adonis, lo atiende y trata de convencerlo y como por arte de magia calma al cliente sólo por su apariencia. De ninguna manera, el cliente indignado y el gerente de ventas sin ninguna estabilidad emocional que lo respalde cae también en la desesperación por no poder deshacerse de este ''cliente conflictivo'' .
Cuando uno trabaja en una empresa tiene como elemento fundamental para mantenerse en ella al compromiso, y por consecuencia natural de ese compromiso arraigada con las experiencia vividas, o convivencia de sus colegas y el futuro de la empresa hace que interiorice todo lo que concierne a ella. Es así que siempre llegamos a saber si nuestros productos son buenos o malos, o también caemos en el cinismo de efectuar la venta de nuestros productos como buenos a pesar que es por todos conocidos que son de mala calidad.
De nada nos sirve la apariencia física si no hay fundamento más fuerte que el de tener salud. Si queremos ser líderes empresariales mejoremos nuestra imagen interna y estabilicemos nuestro espíritu y nuestra mente.
Los mares más inmensos del mundo se alimentan de la inmensidad de los ríos que convergen en él.
Anónimo
Se imagina a Mohamas Ghandi alto, corpulento, atlético y con ojos azules. De ninguna manera. Ese hombre era todo lo contrario. En un ser tan pequeño cabía un alma tan grande. Y es con esta apariencia que lideró la resistencia inglesa solamente con la palabra, enfrentando muchas veces la avanzada belicidad del ejército inglés. Pero él tenía el arma más poderosa que puede tener especie alguna la palabra.
Cuando vamos a pagar los recibos por consumo telefónico. Muchas veces la encargada de cobrarlos tiene una actitud indiferente hacia nosotros, pareciera que no advierte la presencia del cliente. A pesar que es una chica hermosa, su interior está lleno de negativismo que hace que se comporte de esta manera. De otra parte, si tenemos a una persona que nos atiende de manera gentil, prácticamente de manera maternal o paternal, nos sentimos cómodos, a pesar que esta persona no es agraciada físicamente.
Cuando uno es feliz hace felices a los demás Anónimo
Yo soy feliz porque disfruto lo poco que tengo, realmente siento placer a la hora de trabajar, siendo conciente que los objetivos que me pueda trazar caerán por su propio peso serán la base para mantener mi felicidad o incluso aumentarla.
Aprendamos a hacer nuestra felicidad o a hallarla. Aprendamos a escuchar a nuestro corazón. Medite, amanezca con una sonrisa en los labios.
Disfrute realmente el viaje, más que el sitio a donde quiere llegar.
16.3.10
EL JEFE Y EL LÍDER
El jefe de una empresa convoca a sus trabajadores a una reunión para pedirles; en cambio, el LÍDER los convoca para ofrecerles. Tanto va EL AGUA AL CÁNTARO que termina por romperse.
Cuentan que un entrenador de tenis se esforzaba por enseñar a su jugador todos los secretos de ese deporte, entrenaban duro, lo hacía practicar día, tarde y noche con una rudeza que imitaba al lenguaje que utilizaba. Las palabras que salían de la boca del manager eran verdaderamente fuertes, inclusO ya colmaban la paciencia del jugador, quien por temor a los gritos no se atrevía a decirle el malestar que sentía. Y en varias oportunidades quiso abandonar; pero lo peor de todo, es que ya había perdido la pasión por el deporte y había alcanzado el techo, ese límite que sentimos a veces las personas cuando nos damos cuenta que ya no queremos o no podemos hacer nada más. Se acercaba el campeonato nacional de tenis y el entrenador sugiere que el tenista dispute cinco partidos previos. El resultado final fue desastroso, perdió todos los partidos. Enfurecido el entrenador se dirige a los vestuarios a verlo; lo observa derrotado y le grita diciéndole: “ idiota aprende a perder”, a lo que el tenista lleno de ira le responde, perder sí sé, lo que no sé es cómo ganar...
Las columnas más sólidas terminaron desplomándose por la presión del techo
A ninguna persona que se autoestime le simpatiza hacer las cosas presionado. Si es que verdaderamente los líderes empresariales queremos hacer de nuestras empresas exitosas y con una hegemonía en el mercado, es mejor que aprendamos hoy mismo a motivar a nuestros trabajadores. No esperar la circunstancia perfecta. En este preciso instante debemos decidir el futuro de nuestra empresa como un compacto familiar, con todas las características que implica una verdadera familia. Por ejemplo, nosotros como padres, tratamos de educar a nuestros hijos de la mejor manera, tal vez consultamos libros, contratamos a especialistas, pedimos ayuda a nuestros parientes, amigos cercanos o lejanos, pero a alguien que verdaderamente nos de las fórmulas para construir ciudadanos de primera. Entonces, hagamos lo mismo con nuestro personal. No hay imagen más extraordinaria para cualquier empresario que ver a su gente trabajando en armonía y con dedicación. De la misma forma, no hay cuadro más perfecto para el maestro que el ver a sus alumnos trabajando concentrados y entusiasmados. ¿Pero cómo se logra? Definitivamente que la respuesta no sale de la habilidad de un jefe. Según las academias oficiales de las lenguas en el mundo definen al jefe como la persona que tiene a otras bajo sus órdenes; pero más que una estricta definición, los mismos jefes han desprestigiado el término, algo así como lo que ha pasado con la palabra ambición, que a todas luces, para los que somos emprendedores, está sobre entendido que sin ambición no lograríamos los objetivos que nos trazamos. Pero, los malos empresarios, los políticos corruptos o el equivocado ciudadano común y corriente ha desorientado a otras personas que aún no se trazaban proyectos ambiciosos a ver este término como algo sucio o inmoral.
Los jefes son como los paneles de publicidad, te ofrecen de todo y te dicen dónde conseguirlo, pero no se mueven para ayudarte a encontrarlos.
Es común ver en las empresas a jefes que en algún momento fueron empleados; y lo más increíble es que habiendo superado los errores de los cuales hoy reniega, no es capaz de orientar a aquel que los comete y que indudablemente son los mismos que él cometió. Es que resulta cómodo para el ego del jefe saber que hay en la empresa que ahora maneja personas que están debajo de él y que de alguna manera resulta un indicador del desarrollo que va adquiriendo cada uno, para así poder ser objeto de su manipulación. Es muy común escuchar entre los jefes o los mismos compañeros de un trabajador nuevo decir que está bien que se equivoque, porque así aprenderá, que sufra para que vea lo que se siente y el sacrificio que requiere cada cosa. Pero no falta uno que le pide al más antiguo que le apoye al nuevo, que le de consejos y así tome sus precauciones para que no le siga gritando el jefe. A lo que el antiguo le responde, estás loco, yo sufrí mucho, ahora que sufra él y aprenda.
La palabra pecado deriva de pecus, que significa pie defectuoso, pie incapaz de recorrer un camino. La forma de corregir el pecado es andando siempre hacia adelante, adaptándose a nuevas situaciones y recibiendo, a cambio, las bendiciones que la vida da con tanta generosidad a los que le piden, ésta es la tarea de un verdadero líder de empresa.
Cuando el individuo que direcciona una empresa a objetivos que no se adaptan a la realidad de la mente del mediocre y trasciende la responsabilidad de los que solamente cumplen su labor sin comprometerse verdaderamente con ella, corre el riesgo de alcanzar el éxito. Sin embargo, es conciente que él jamás va a poder alcanzarlo solo. Sabe que necesita de su gente, por eso enseña a sus trabajadores y aprende de ellos, un principio educativo que los maestros también deberían tener presente a la hora de interactuar con sus alumnos. Si el director del departamento de reparto se equivocó, el líder no lo reprende delante de todos, en un momento adecuado y de apacible tranquilidad conversan, construyen y hacen de la experiencia un pretexto para agigantarse.
En cierta ocasión la negligencia del gerente de ventas de la IBM le ocasionó una pérdida de $600. 000. El tipo con el ánimo por el suelo, acobardado y frustrado se acerca a Tomas Wattson diciéndole que renunciaba a la empresa, porque no estaba capacitado para dirigir un cargo tan importante. A lo que el Presidente de la IBM le responde, vuelve enseguida a tu trabajo que acabo de invertir esos $600 000 en tu capacitación.
El Líder tiene la virtud del Cicopompo
Como en la mitología griega, el Cicopompo conducía a las almas a otro mundo, el Líder conduce con una consolidada inteligencia emocional a sus empleados hacia el mundo del éxito y les enseña a enseñar al personal nuevo que va contratando la empresa a conducirse por el mismo camino.
Por todo lo dicho...
El Jefe - El Líder
- Dirige - Orienta
- Habla - Comunica
- Llama la atención
al empleado delante - Le llama la atención a solas y
de todo el personal lo felicita en público.
- Está pendiente - Está más pendiente de los
de los errores aciertos que de los errores
- Ante los errores - Ante los errores se agiganta se le cae el mundo
- Impone - Propone
- Trabaja - Disfruta lo que hace
- Alcanza objetivos - Alcanza el éxito
- Puede ser efectivo - Es asertivo
- Está acostumbrado a ver - Aplica la Tecnología de lo Obvio
Cuentan que un entrenador de tenis se esforzaba por enseñar a su jugador todos los secretos de ese deporte, entrenaban duro, lo hacía practicar día, tarde y noche con una rudeza que imitaba al lenguaje que utilizaba. Las palabras que salían de la boca del manager eran verdaderamente fuertes, inclusO ya colmaban la paciencia del jugador, quien por temor a los gritos no se atrevía a decirle el malestar que sentía. Y en varias oportunidades quiso abandonar; pero lo peor de todo, es que ya había perdido la pasión por el deporte y había alcanzado el techo, ese límite que sentimos a veces las personas cuando nos damos cuenta que ya no queremos o no podemos hacer nada más. Se acercaba el campeonato nacional de tenis y el entrenador sugiere que el tenista dispute cinco partidos previos. El resultado final fue desastroso, perdió todos los partidos. Enfurecido el entrenador se dirige a los vestuarios a verlo; lo observa derrotado y le grita diciéndole: “ idiota aprende a perder”, a lo que el tenista lleno de ira le responde, perder sí sé, lo que no sé es cómo ganar...
Las columnas más sólidas terminaron desplomándose por la presión del techo
A ninguna persona que se autoestime le simpatiza hacer las cosas presionado. Si es que verdaderamente los líderes empresariales queremos hacer de nuestras empresas exitosas y con una hegemonía en el mercado, es mejor que aprendamos hoy mismo a motivar a nuestros trabajadores. No esperar la circunstancia perfecta. En este preciso instante debemos decidir el futuro de nuestra empresa como un compacto familiar, con todas las características que implica una verdadera familia. Por ejemplo, nosotros como padres, tratamos de educar a nuestros hijos de la mejor manera, tal vez consultamos libros, contratamos a especialistas, pedimos ayuda a nuestros parientes, amigos cercanos o lejanos, pero a alguien que verdaderamente nos de las fórmulas para construir ciudadanos de primera. Entonces, hagamos lo mismo con nuestro personal. No hay imagen más extraordinaria para cualquier empresario que ver a su gente trabajando en armonía y con dedicación. De la misma forma, no hay cuadro más perfecto para el maestro que el ver a sus alumnos trabajando concentrados y entusiasmados. ¿Pero cómo se logra? Definitivamente que la respuesta no sale de la habilidad de un jefe. Según las academias oficiales de las lenguas en el mundo definen al jefe como la persona que tiene a otras bajo sus órdenes; pero más que una estricta definición, los mismos jefes han desprestigiado el término, algo así como lo que ha pasado con la palabra ambición, que a todas luces, para los que somos emprendedores, está sobre entendido que sin ambición no lograríamos los objetivos que nos trazamos. Pero, los malos empresarios, los políticos corruptos o el equivocado ciudadano común y corriente ha desorientado a otras personas que aún no se trazaban proyectos ambiciosos a ver este término como algo sucio o inmoral.
Los jefes son como los paneles de publicidad, te ofrecen de todo y te dicen dónde conseguirlo, pero no se mueven para ayudarte a encontrarlos.
Es común ver en las empresas a jefes que en algún momento fueron empleados; y lo más increíble es que habiendo superado los errores de los cuales hoy reniega, no es capaz de orientar a aquel que los comete y que indudablemente son los mismos que él cometió. Es que resulta cómodo para el ego del jefe saber que hay en la empresa que ahora maneja personas que están debajo de él y que de alguna manera resulta un indicador del desarrollo que va adquiriendo cada uno, para así poder ser objeto de su manipulación. Es muy común escuchar entre los jefes o los mismos compañeros de un trabajador nuevo decir que está bien que se equivoque, porque así aprenderá, que sufra para que vea lo que se siente y el sacrificio que requiere cada cosa. Pero no falta uno que le pide al más antiguo que le apoye al nuevo, que le de consejos y así tome sus precauciones para que no le siga gritando el jefe. A lo que el antiguo le responde, estás loco, yo sufrí mucho, ahora que sufra él y aprenda.
La palabra pecado deriva de pecus, que significa pie defectuoso, pie incapaz de recorrer un camino. La forma de corregir el pecado es andando siempre hacia adelante, adaptándose a nuevas situaciones y recibiendo, a cambio, las bendiciones que la vida da con tanta generosidad a los que le piden, ésta es la tarea de un verdadero líder de empresa.
Cuando el individuo que direcciona una empresa a objetivos que no se adaptan a la realidad de la mente del mediocre y trasciende la responsabilidad de los que solamente cumplen su labor sin comprometerse verdaderamente con ella, corre el riesgo de alcanzar el éxito. Sin embargo, es conciente que él jamás va a poder alcanzarlo solo. Sabe que necesita de su gente, por eso enseña a sus trabajadores y aprende de ellos, un principio educativo que los maestros también deberían tener presente a la hora de interactuar con sus alumnos. Si el director del departamento de reparto se equivocó, el líder no lo reprende delante de todos, en un momento adecuado y de apacible tranquilidad conversan, construyen y hacen de la experiencia un pretexto para agigantarse.
En cierta ocasión la negligencia del gerente de ventas de la IBM le ocasionó una pérdida de $600. 000. El tipo con el ánimo por el suelo, acobardado y frustrado se acerca a Tomas Wattson diciéndole que renunciaba a la empresa, porque no estaba capacitado para dirigir un cargo tan importante. A lo que el Presidente de la IBM le responde, vuelve enseguida a tu trabajo que acabo de invertir esos $600 000 en tu capacitación.
El Líder tiene la virtud del Cicopompo
Como en la mitología griega, el Cicopompo conducía a las almas a otro mundo, el Líder conduce con una consolidada inteligencia emocional a sus empleados hacia el mundo del éxito y les enseña a enseñar al personal nuevo que va contratando la empresa a conducirse por el mismo camino.
Por todo lo dicho...
El Jefe - El Líder
- Dirige - Orienta
- Habla - Comunica
- Llama la atención
al empleado delante - Le llama la atención a solas y
de todo el personal lo felicita en público.
- Está pendiente - Está más pendiente de los
de los errores aciertos que de los errores
- Ante los errores - Ante los errores se agiganta se le cae el mundo
- Impone - Propone
- Trabaja - Disfruta lo que hace
- Alcanza objetivos - Alcanza el éxito
- Puede ser efectivo - Es asertivo
- Está acostumbrado a ver - Aplica la Tecnología de lo Obvio
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